20.01.2014 10:48

"El resurgir de Birmania puede robar protagonismo a Tailandia", apunta Gwen Robinson (“Cómo Aprender Lecciones de la Historia en Asia” -FT-). Las situaciones de ambos países se han invertido: en Tailandia vuelven las protestas contra el Gobierno; pero en Birmania ha desaparecido el miedo de la dictadura militar. En su capital reina la democracia y la tranquilidad; y aunque no se debe ignorar la falta de libertad en otras zonas del país, “el contraste entre Yangon y Bangkok es muy fuerte”, constata Robinson (FT). Mientras la capital tailandesa retrocede y vuelve al caos, la birmana crece a gran velocidad. Económicamente, Tailandia tiene mucho que perder con la agitación política. Y si bien la economía birmana sólo es una pequeña parte de la tailandesa, podría estar robándole protagonismo ante los inversores internacionales. “El dominio de los intereses personales sobre la política podría acabar con décadas de desarrollo en Tailandia. Birmania ya estuvo gobernada por militares que dirigían el país como un feudo. La situación de Tailandia, presa de intereses personales, lleva a empresarios y altos cargos de Yangon a ‘aprender la lección’ de la Historia”, concluye Robinson (FT).